¿Cuántas veces has escuchado la expresión “qué creativo eres”? Si la has escuchado ¡felicidades!, eres un agente creativo. Si no la has escuchado, ¡felicidades! eres un agente creativo. De acuerdo con determinadas teorías de la creatividad como Gardner (1995) menciona, la creatividad es un elemento innato del ser humano el cual está en su máximo esplendor durante la infancia. Desde que tiene consciencia y memoria sobre el mundo que lo rodea, el infante siempre está ideando nuevos esquemas mentales para poder cubrir sus necesidades y gustos dentro del juego, la experimentación del mundo y el aprendizaje continuo.
Todo proceso creativo se origina gracias a los elementos que conoce el pequeño, lo que ha observado en casa, en la calle, en los medios de comunicación. Esa información es procesada y asimilada de acuerdo a sus experiencias previas y actuales. En ocasiones, la información se manifiesta por medio del juego, ya sea por imitación o por interés de transmitir a otras personas lo que él sabe. Pero el hecho de repetir lo que un pequeño observa y aprende, no significa que no tenga la capacidad de mejorarlo. ¡Es todo lo contrario!
Cuando un niño empieza a jugar, idea un escenario imaginario, o adapta los recursos que tiene para llegar a su objetivo. Recuerda cuando ibas en la primaria y no estaba permitido llevar balones de fútbol a la escuela. ¿Qué era lo que hacías para satisfacer ese deseo por jugar fútbol? La clásica botella de plástico convertida en balón. Piensa en el primer niño o adulto que aplicó esa idea, ¿crees que lo consideraron un genio? La verdad es que no sabemos con certeza qué es lo que las personas a su alrededor pensaron de él o ella, y probablemente a la o las personas que crearon esta “simple” idea ni les importaba la opinión pública. Pero lo que sí sabemos, es que cambió un instante de nuestra vida y logramos jugar con todos nuestros amigos una partida justa y bastante divertida.
Ahora piensa cómo esta creatividad la aplican los pequeños no solo en el juego. La creatividad se puede presentar en el arte por medio de la pintura, la música, la creación de elementos nuevos e innovadores; y creemos que un ser creativo únicamente radica en estos niños y adultos. Pero, probablemente, hemos establecido una idea poco creativa de lo que realmente implica la creatividad.
La creatividad no solo se encuentra en elementos tangibles y visibles llamativos para nuestros sentidos. El simple hecho de poder solucionar un problema cotidiano implica que tu cerebro active sinapsis previas (recuerdos), tu cuerpo manifiesta cambios como preocupación, palpitación acelerada del corazón, o cualquier otro síntoma. Es entonces cuando generas una idea o una estrategia para poder solucionar la situación, quieres satisfacer esa necesidad. Es claro que en ocasiones este proceso se vuelve rutinario, pero en tu misma rutina estas siendo un agente creativo por ti y para ti. Reconócelo y piensa en una situación en la cual obtuviste un resultado aún mejor que el que tú mismo esperabas. Y en ocasiones esta misma rutina sale del juego porque algún elemento no está funcionando para que se resuelva el objetivo. Es aquí donde nuevamente tu sentido de razonamiento lógico y creatividad se activa. A su vez, la creatividad se logra manifestar al momento de cumplir el ocio y crear ideas que lleguen a ser funcionales tanto para ti, como para la sociedad. Y en éste punto te has convertido en un agente creativo e innovador. Es claro que conforme pasan nuestros días y nuestra vida, las obligaciones y responsabilidades cambian, llegan a incrementar y simplemente nos dejamos absorber por esa “rutina”. Pero la excelente noticia es que ahora sabes que eres un agente creativo activo. No esperes a que alguien lo reconozca por ti, date cuenta de la gran capacidad de creatividad que tienes en tu trabajo, con tus hijos, sobrinos o alumnos, cuando quieres resolver una necesidad y adaptas todas tus herramientas para lograrlo. Así que….muchas felicidades, ¡QUÉ CREATIVO ERES! Construye ideas, genera estrategias, adapta herramientas; en Edubotikx te apoyamos.